domingo, 27 de mayo de 2012

Atic Atac, Spectrum

Como en los años ochenta fui usuario de un Amstrad CPC 464, hay videojuegos que desconozco porque no saliero para este sistema; pero que perviven en la memoria de muchos aficionados a la escena retro. Y “Atic atac” es uno de estos casos.

Supe de la existencia de este videojuego gracias a un buen amigo, usuario de Spectrum, y unos cuantos años mayor que yo. Tras su recomendación, instalé un emulador de Spectrum en mi PC, y me dispuse a disfrutar de un clásico de 8 bits que todavía no había catado; demostrando mi madurez, sí, pues en mi época de "Cpcero" jamás me hubiese "rebajado" a probar un videjuegos de Spectrum sin albergar prejuicios. Aunque he de reconocer, que todavía me cuesta un poco desprenderme de mi actitud militante.

Lógicamente, al contrario de lo que ocurre con los demás videojuegos de 8 bits, de los cuales he venido hablando —y seguiré haciéndolo—, no existe un elemento nostálgico, un lazo emocional, que provoque que jugarlo se torne algo especial y único. Afronto la experiencia sin ningún lastre del pasado. Esto no es ni bueno ni malo. Simplemente, hace que mi opinión sobre “Atic Atac” sea más aséptica. 

Si hay algo que nos mueve a todos aquellos que disfrutamos con la escena retro, es la huella indeleble de lo vivido durante nuestra más tierna infancia. Los videojuegos de 8 bits están arraigados en nuestra memoria, y los disfrutamos, no solo porque fueron buenos programas, sino, también, porque nos hacen retrotráenos a tiempos más ingenuos y a experiencia vitales que, por suerte o desgracia, jamás podrán volver a repetirse.

Pero dejémonos de añoranzas, y pasemos a analizar “Atic Atac”.

El videojuego fue desarrollado por los hermanos Tim y Chris Stamper. La perspectiva es cenital, aunque no del todo. Los hermanos Stamper tendrían que pulir lo que acabaría denominándose perspectiva isométrica; característica común en todos aquellos videojuegos que desarrollaron par los microordenadores de 8 bits. Después, vendrían otros clásicos, elaborados por la excelente compañía “Ultimate Play The Game”, nombre comercial de “Ashby Computers&Graphics”, como “Sabre Wulf”, “Underwurlde”, “Knight Lore”, “Alien 8”, “Nightshade” o “Gunfright”.

El videojuego tiene un sistema de juego muy sencillo: mezcla la videoaventura con el género arcade, aunque prima la acción. Los gráficos no son nada del otro mundo, pero cumplen sobradamente; más, tratándose de un videojuego publicado en 1983, cuando la informática y la industria de los videojuegos estaban aún en pañales. La paleta de colores del Spectrum está aprovechada hasta el límite.

Y al igual que ocurre con muchos de los primeros videojuegos, hay dos factores por los que este programa destaca especialmente: la originalidad y la adicción.

“Atic Atac” es puro entretenimiento, sin pretensiones. Los movimiento de nuestros personajes son rápidos y fluidos. Recordemos que, en aquella época, los programadores debían paliar la escasez de memoria de los microprocesadores de 8 bits, con cantidades ingentes de ingenio y atrevimiento. 


Debemos encontrar las tres piezas de una llave y escapar de un terrorífico castillo, mientras sus monstruosos moradores intentarán drenar nuestra energía, hasta darnos muerte. 

Un detalle original, y que llama poderosamente la atención —pues en la actualidad es algo normal, pero en aquellos tiempos fue toda una innovación—, es la opción de poder elegir entre tres personajes distintos para jugar: un mago, un caballero o un ladrón. En función de quien elijamos, usaremos unas habilidades y armas determinadas. Otro dato curioso, es que las armas rebotan en las paredes; lo que nos facilita golpear a nuestros enemigos, valiéndonos de carambolas y florituras varias.


 Para terminar, decir que, como ocurre con la mayoría de los clásicos de 8 bits, existe un remake de “Atic Atac”, el cual es de una calidad impresionante. Los gráficos mantienen la esencia, pero han sido mejorados, y el ritmo y la jugabilidad no deacae con respecto al original.






Ya sea con un emulador de Spectrum, ya sea instalando el remake, os recomiendo jugarlo. A ver si alguien hace una versión para Amstrad Cpc.

Sí, lo reconozco, sigo siendo pro Amstrad.